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Levítico 20

Levítico 20: Leyes de Santidad y Castigos

El capítulo 20 del libro de Levítico presenta una serie de mandamientos divinos acompañados de las consecuencias específicas para quienes los violen. Este texto no solo enfatiza la santidad como un requisito indispensable para el pueblo de Israel, sino que también subraya la seriedad con la que Dios trata los pecados, especialmente aquellos que desafían Su orden moral o comprometen la pureza de la comunidad. A través de estas leyes, se refuerza el principio fundamental: “Sed santos, porque yo, Jehová, vuestro Dios, soy santo” (v. 7).


Introducción: La Ley y su Propósito

Dios comienza recordando al pueblo que las leyes que están por ser reiteradas tienen un propósito claro: preservar la santidad y evitar que ellos imiten las prácticas abominables de las naciones circundantes. Estas normas no son arbitrarias, sino que están diseñadas para proteger tanto la relación del pueblo con Dios como la integridad de su sociedad.

  • Versículo 2: Dios prohíbe expresamente dar a sus hijos como sacrificio a Moloc, una práctica idolátrica común entre las culturas paganas. Hacerlo profanaría el nombre de Dios y contaminaría la tierra.

Consecuencias Estrictas para la Desobediencia

En este capítulo, cada transgresión está acompañada de un castigo específico, lo que revela la gravedad de estos actos:

  1. Sacrificios a Moloc (vv. 2-5):
  • Quien entregara a su hijo como sacrificio a Moloc sería apedreado hasta morir por la comunidad.
  • Si la gente ignoraba tal acto y no juzgaba al culpable, Dios mismo intervendría para castigar no solo al individuo, sino a toda la comunidad.
  1. Consultas a espíritus y adivinos (v. 6):
  • Aquellos que buscaran consultar a muertos o practicaran la adivinación serían cortados del pueblo, ya que tales prácticas contaminaban la santidad requerida ante Dios.
  1. Maldición contra los padres o desobediencia (v. 9):
  • Maldecir a los propios padres era considerado un crimen capital; el culpable debía ser ejecutado, reflejando la importancia del respeto familiar como base de una sociedad justa.
  1. Adulterio (v. 10):
  • El adulterio era castigado con la muerte tanto para el hombre como para la mujer involucrada, destacando la seriedad de mantener la fidelidad matrimonial.
  1. Relaciones incestuosas (vv. 11-12, 14, 17, 19-21):
  • Varias formas de incesto eran detalladas y prohibidas, con castigos que incluían la expulsión o la muerte. Estas leyes buscaban proteger la estructura familiar y evitar la corrupción moral.
  1. Homosexualidad (v. 13):
  • Las relaciones homosexuales eran consideradas abominaciones, y quienes las practicaran serían condenados a muerte.
  1. Bestialidad (vv. 15-16):
  • Cualquier acto sexual con animales resultaba en la ejecución tanto del humano como del animal involucrado, mostrando la gravedad de esta confusión del orden natural.
  1. Casamiento con una mujer y su madre (v. 14):
  • Esta práctica era considerada una grave perversión y llevaba consigo la pena de quemadura para los implicados.

Principios Espirituales Profundos

Este capítulo revela varias verdades espirituales eternas:

  1. La Santidad de Dios Exige Pureza Moral:
  • Todas estas leyes subrayan que la santidad es inseparable de la obediencia a los mandamientos divinos. Vivir en santidad implica evitar cualquier comportamiento que contradiga el carácter de Dios.
  1. La Importancia de la Comunidad:
  • Las acciones de un individuo afectan a toda la comunidad. Por eso, la participación activa de todos en mantener la santidad colectiva es crucial.
  1. La Gravedad del Pecado:
  • Los castigos severos demuestran que el pecado tiene consecuencias graves, no solo en el ámbito espiritual, sino también en la vida terrenal.
  1. Protección contra la Idolatría:
  • Muchas de las prácticas prohibidas estaban relacionadas con rituales paganos. Al eliminarlas, Dios protegía a Israel de caer en idolatría y aseguraba que Él fuera adorado exclusivamente.

Un Recordatorio de Dependencia Divina

En última instancia, este capítulo sirve como un llamado poderoso a vivir bajo la autoridad de Dios, obedeciendo Sus mandamientos sin excepción. La santidad no es opcional, sino una condición necesaria para permanecer en comunión con Dios y disfrutar de Sus bendiciones.

Comparte este artículo con aquellos que deseen comprender mejor las leyes de santidad en Levítico. Estas enseñanzas nos recuerdan que la verdadera adoración exige corazones contritos y una vida dedicada a la obediencia a Dios.

Texto integro del Libro de Levítico capítulo: 20

Levítico capítulo 20

Capítulo 20

Y HABLÓ Jehová á Moisés diciendo:
2 Dirás asimismo á los hijos de Israel: Cualquier varón de los hijos de Israel, ó de los extranjeros que peregrinan en Israel, que diere de su simiente á Moloch, de seguro morirá: el pueblo de la tierra lo apedreará con piedras.
3 Y yo pondré mi rostro contra el tal varón, y lo cortaré de entre su pueblo; por cuanto dió de su simiente á Moloch, contaminando mi santuario, y amancillando mi santo nombre.
4 Que si escondiere el pueblo de la tierra sus ojos de aquel varón que hubiere dado de su simiente á Moloch, para no matarle,
5 Entonces yo pondré mi rostro contra aquel varón, y contra su familia, y le cortaré de entre su pueblo, con todos los que fornicaron en pos de él, prostituyéndose con Moloch.
6 Y la persona que atendiere á encantadores ó adivinos, para prostituirse tras de ellos, yo pondré mi rostro contra la tal persona, y cortaréla de entre su pueblo.
7 Santificaos, pues, y sed santos, porque yo Jehová soy vuestro Dios.
8 Y guardad mis estatutos, y ponedlos por obra: Yo Jehová que os santifico.
9 Porque varón que maldijere á su padre ó á su madre, de cierto morirá: á su padre ó á su madre maldijo; su sangre será sobre él.
10 Y el hombre que adulterare con la mujer de otro, el que cometiere adulterio con la mujer de su prójimo, indefectiblemente se hará morir al adúltero y á la adúltera.
11 Y cualquiera que se echare con la mujer de su padre, la desnudez de su padre descubrió; ambos han de ser muertos; su sangre será sobre ellos.
12 Y cualquiera que durmiere con su nuera, ambos han de morir: hicieron confusión; su sangre será sobre ellos.
13 Y cualquiera que tuviere ayuntamiento con varón como con mujer, abominación hicieron: entrambos han de ser muertos; sobre ellos será su sangre.
14 Y el que tomare mujer y á la madre de ella, comete vileza: quemarán en fuego á él y á ellas, porque no haya vileza entre vosotros.
15 Y cualquiera que tuviere cópula con bestia, ha de ser muerto; y mataréis á la bestia.
16 Y la mujer que se allegare á algún animal, para tener ayuntamiento con él, á la mujer y al animal matarás: morirán infaliblemente; será su sangre sobre ellos.
17 Y cualquiera que tomare á su hermana, hija de su padre ó hija de su madre, y viere su desnudez, y ella viere la suya, cosa es execrable; por tanto serán muertos á ojos de los hijos de su pueblo: descubrió la desnudez de su hermana; su pecado llevará.
18 Y cualquiera que durmiere con mujer menstruosa, y descubriere su desnudez, su fuente descubrió, y ella descubrió la fuente de su sangre: ambos serán cortados de entre su pueblo.
19 La desnudez de la hermana de tu madre, ó de la hermana de tu padre, no descubrirás: por cuanto descubrió su parienta, su iniquidad llevarán.
20 Y cualquiera que durmiere con la mujer del hermano de su padre, la desnudez del hermano de su padre descubrió; su pecado llevarán; morirán sin hijos.
21 Y el que tomare la mujer de su hermano, es suciedad; la desnudez de su hermano descubrió; sin hijos serán.
22 Guardad, pues, todos mis estatutos y todos mis derechos, y ponedlos por obra: y no os vomitará la tierra, en la cual yo os introduzco para que habitéis en ella.
23 Y no andéis en las prácticas de la gente que yo echaré de delante de vosotros: porque ellos hicieron todas estas cosas, y los tuve en abominación.
24 Empero á vosotros os he dicho: Vosotros poseeréis la tierra de ellos, y yo os la daré para que la poseáis por heredad, tierra que fluye leche y miel: Yo Jehová vuestro Dios, que os he apartado de los pueblos.
25 Por tanto, vosotros haréis diferencia entre animal limpio é inmundo, y entre ave inmunda y limpia: y no ensuciéis vuestras personas en los animales, ni en las aves, ni en ninguna cosa que va arrastrando por la tierra, las cuales os he apartado por inmundas.
26 Habéis, pues, de serme santos, porque yo Jehová soy santo, y os he apartado de los pueblos, para que seáis míos.
27 Y el hombre ó la mujer en quienes hubiere espíritu phitónico ó de adivinación, han de ser muertos: los apedrearán con piedras; su sangre sobre ellos.

Resumen del capítulo 20 del libro Levítico

El capítulo 20 del libro de Levítico continúa abordando leyes y mandamientos importantes, centrándose en las sanciones y castigos por la violación de ciertas leyes morales y religiosas. A continuación, se presenta un resumen exhaustivo de este capítulo:

  1. Castigo por el Sacrificio de Hijos a Molek (Versículos 1-5): Dios advierte que cualquier persona que sacrifique a sus hijos a Molek, una deidad pagana, será castigada con la pena de muerte. También se amenaza con cortar relaciones con la persona y su familia.
  2. Castigo por la Adivinación y Consulta a Espíritus (Versículos 6-8): Aquellos que practiquen la adivinación o consulten a espíritus serán apartados de la comunidad de Israel y recibirán su castigo.
  3. Castigo por Maldiciones a los Padres (Versículos 9): Se impone la pena de muerte a quienes maldigan a sus padres.
  4. Castigo por Incesto (Versículos 10-21): Se prohíben las relaciones incestuosas, incluyendo el sexo con una hermana, una tía o una nuera. El castigo por violar estas prohibiciones es la exclusión de la comunidad y la pena de muerte.
  5. Castigo por Actos Homosexuales (Versículos 13): Se prohíben los actos homosexuales, y aquellos que los practiquen serán condenados a muerte.
  6. Castigo por Adulterio (Versículos 10): Se impone la pena de muerte tanto al hombre como a la mujer que cometan adulterio.
  7. Castigo por Bestialidad (Versículos 15-16): Se prohíbe la bestialidad, y tanto el humano como el animal involucrado serán ejecutados.
  8. Santificación y Separación de lo Impuro (Versículos 22-26): Dios insta al pueblo de Israel a ser santos y separados de las naciones circundantes. Se les recuerda que deben obedecer sus leyes y estatutos.
  9. Conclusión (Versículos 27-29): El capítulo concluye con una advertencia sobre las consecuencias de no obedecer las leyes y mandamientos de Dios. A aquellos que cometen estas abominaciones se les advierte que serán eliminados de la comunidad de Israel.

En resumen, el capítulo 20 de Levítico establece sanciones y castigos por la violación de diversas leyes morales y religiosas. Estas leyes abarcan temas como el sacrificio de hijos a deidades paganas, la adivinación, la maldición de los padres, el incesto, la homosexualidad, el adulterio, la bestialidad y más. La severidad de los castigos refleja la importancia de la obediencia a las leyes de Dios en la vida del pueblo de Israel y la necesidad de mantener la santidad y la pureza en la comunidad.

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